¿Por qué mamá se escribe con M y con A? #díadelamadre

Desde el punto de vista educacional los primeros vocablos que articulan y modulan los niños son letras como la m, la a, la b, entre otras. De manera rápida añaden más vocablos, y casi sin darnos cuenta nos empiezan a llamar por nuestro nombre y empiezan a pedir cosas sin parar.

Pero todas esas cosas, suenan a cosas de mayores, y no quiero acabar creyendo que las mamas, se llaman mamá, simplemente porque son las primeras palabras que modulamos.

Creo que la palabra mamá esconde algo más que los hijos por se hijos ya sabemos de sobra, ¿pero y que pasa si nos olvidamos de que lo sabemos?

Mamá se escribe con M y con A porque:

La primera M, esconde la palabra Madurez, personalidad madura. Esta M es mucho más grande lo que podamos imaginar. Todos llevamos en nuestro nombre la letra M, aunque a veces pase oculta.

En definitiva queramos o no, todos aspiramos, física y psicologicamente a la madurez, es decir, a alcanzar un estado donde se puede decir que hemos sido capaz de desarrollar dichas capacidades, de controlar los estados de ánimo o todas esas situaciones que a las personas inmaduras, a veces, se les escapan de las manos.

De aquí se deriva que las mamas, valgan para todo, sean SUPERMAMAS; van a la compra, trabajan, hacen la comida, tienden la ropa, la recogen, nos llevan y nos traen del cole, saben lo que nos pasa, nos consciente, pero a la vez nos exigen... Hechos que casi nunca valoramos, hasta que nos toca ejercer de madres y salir del nido.

La primera A se la palabra mama, quiere decir que son, auténticas.

Sólo lo auténtico, es lo que sobresale del resto. Vivimos rodeados de miles de personas, iguales en muchas cosas, pero diferentes a la vez. Y en esto las madres son especialistas, saben diferenciarse del resto y ser las mejores, solo porque han entendido que la primera tarea que tienen es la de vivir la vida de manera auténtica, es decir, para sus hijos, para su familia.

Cuando dejamos que ese lugar lo ocupen los caprichos personales, los propios intereses, pasamos de ser auténticos a convertirnos en copias de no se sabe muy bien que.

Con M de MIMAR.

Sólo las madres saben mimar, los demás consientes, malcrían, te regalan cosas...

Mimar puede ser sinónimo de tratar a alguien con cariño y delicadeza, vale, pero como he dicho sólo las madres saben mimar, porque ellas más que nadie saben que es lo que nos convienen y cuando.

Quizás el problema de nuestros días, sea saber donde está la medida de ese mimar, en saber donde y cuando conviene dar. El cariño es una de las cosas que no se compra con nada material, ni se vende en las tiendas, ni se muestra en los escaparates.

Todos podemos mimar, porque todos tenemos corazón, la diferencia está en que vamos guardando en él.

Y la última A, lleva dentro la palabra AMOR.

Es bonita la palabra amor, suena bien y más aún cuando la decimos a alguien a quién queremos. Pero hacer las cosas con amor, no significa hacer las cosas cuando todo va bien, con cariño y a la persona que queremos.

El amor no sabe dulce, ni se pinta con forma de corazón, el amor, sabe de manera diferente y esto sólo lo sabemos cuando lo hemos experimentado. Amar a veces duele, molesta, cuesta, pero te confieso un secreto, vale más ese amor, que los te quiero por mensajes de móvil, o a través de las redes sociales.

El amor de las madres, que es como un escudo, que nos hace soportar los defectos de los demás, o de los hijos, cuando ya no podemos más.

Son muchas las cosas que se pueden decir de una madre, pero espero que al hacer esta breve descripción de estas cuatro palabras, te traigan a la memoria la imagen de tú madre o de esa persona que es para ti como una madre.

Madre sólo hay una, y al igual que ellas han sabido soportar nuestros defectos, ahora nos toca a nosotros, imitarlas e intentar ser madres, no sólo de nuestros hijos, sino también de la gente que nos rodea.

¡¡Felicidades mamá!!