Vísteme despacio que tengo prisa. #prisa #tiempo #organizar
La
primera vez que escuché este dicho, tuve que repetírmelo varias veces, ya que no conseguía entender el sentido. Los años me han
dejado adivinar y palpar lo que este traía consigo.
Comenzamos
nuevo curso, nuevas etapas y nuevas cimas que esperan ser
conquistadas.
Los
compañeros de camino ya los conocemos y sabemos que antes o después
las prisas van a aparecer, por lo que, tranquilo, esto esta hecho!
No
sabría decirte si este es el mejor lema para este curso, pero sí se
decirte, que detesto llegar a los sitios con prisas, hacer las cosas
deprisa y un sin fin de cosas que nos acaban agotando por culpa de ir
siempre corriendo.
El
protagonista de este refrán es Fernando VII, que mientras era
vestido por su serviente para una importante reunión, le dijo la
famosa frase al ver que este no atinaba por lo nervioso que estaba.
Y
a muchos de nosotros nos pasa que las prisas, la urgencia por hacer
las cosas rápido o llegar a tiempo a los sitios, hace que vayamos
sembrando catástrofes; dejando cosas a medias, atropellando a las
personas de nuestro alrededor, en el sentido de, dejarlas con las
palabra en la boca, no saludando o despidiendo al llegar a los
sitios, dejando la casa patas arriba....
Me
gusta llamar a estos despistes catástrofes porque un día o varios
tenemos derecho a ir corriendo, pero no podemos acabar siendo
esclavos de las prisas, por no habernos organizado, por desordenes o
por perezas acumuladas.
Me
duelen los oídos de escuchar quejas en la parada del bus, en la cola
de la copistería, en la calle etc. Y es bueno saber que a todos nos falta tiempo, pero detrás
de cada queja hay soluciones que esperan ser descubiertas.
La
queja nunca trajo nada bueno, solo excusas para seguir sin hacer lo
que queremos cambiar.
Según
Suetonio -un historiador romano posterior a Augusto- aconsejó lo
siguiente:
Caminad lentamente si queréis
llegar más pronto a un trabajo bien hecho.
No
se trata de que este año te duermas en los laureles o vayas a ritmo
de tortuga, sino de que cada paso que demos lo demos con un paso
firme y seguro. Quizás no tengamos reuniones importantes como
Fernando VII, pero depende de como resolvamos los acontecimientos de
cada día, para ir construyendo un mundo mejor, donde la queja, las
prisas se nos queden lejos.
El
tiempo tiene algo especial y a veces nos sorprende, las agujas no van
más rápido cuando tenemos prisa o muchas cosas que hacer, por lo
que, vísteme despacio que llevo prisa! Y este año tenemos muchas
cosas que hacer.
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