Tarta damero o damas.
Para el día de hoy, algo fácil, apto para todos los paladares.
Una manera de elaborar la tarta damero o tarta damas que seguro que para alguno de los aficionados a la repostería ya es conocida.
Esta es una tarta distinta y original, atractiva en cuanto a su manera de presentar, así que os animo a que os pongáis manos a la obra y la hagáis algún día.
Como se aprecia en la imagen, esta tarta juega con bizcocho de dos sabores.
En cuanto a la receta del bizcocho podéis usar el que más os guste. La que usamos para la tarta que elaboramos en casa fue la que pusimos en la receta del bizcocho de colores, ya que nos dio muy buen resultado en cuanto al sabor y textura final de este.
La tarta esta formada por dos bizcochos, una blanco y otro negro.
- Para el bizcocho blanco realizamos una receta de bizcocho sencillo y para el bizcocho negro, lo que hicimos fue, quitar 50 gr de harina y sustituirlo por colacao, para que le de color oscuro.
- Una vez tengamos los bizcochos, los cortaremos por la mitad para que la tarta no se quede muy alta.
- A continuación buscaremos dos moldes/corta pastas redondos que nos permitan hacer un corte al bizcocho de manera que nos quede a la misma distancia entre uno y otro, para que luego coincidan los distintos trozos, como se ve en la imagen.
- Una vez cortados e intercalados los dos tipos de bizcochos, nos disponemos a montar capa sobre capa, para esto es recomendable untar en cada capa mermelada, chocolate, glaseado de manera que las una y no se separen al cortarlo.
- El acabado final de esta tarta, puede ser el que queramos, recomiendo, chocolate blanco/ negro de cobertura o glaseado de limón.
El chocolate de cobertura, simplemente, necesitará calentarse al baño maría o en el microondas, con cuidado de que no se queme y echarlos por encima de la tarta, extenderlo con la espátula y dejar que se solidifique.
En cuanto al glaseado, utilizar la cantidad que queramos, una orientadora:
- 200 gr de azúcar glass
-30 gr de zumo de limón
El glaseado blanco o sencillo consiste en poner el azúcar glasé en un cuenco y añadir cucharadas de agua sin dejar de remover con una espátula o cuchara de madera. El objetivo es formar una pasta muy fluida y trabajarla de manera enérgica hasta conseguir una mezcla pastosa. Para darle un color más blanco se añaden unas gotas de limón.
El azúcar glasé se mezcla con agua o con una clara y unas gotas de limón
¡Espero que disfrutes con estas dosis de repostería creativa!
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